domingo, 29 de enero de 2012

Atención: ¿Cómo saber si le gustas a un chico?

Aquel caluroso día del verano del 88 Isabel terminaba de armar la última torre de su castillo de arena. Se había tardado casi toda la mañana, retocando con paciencia cada detalle. Este es el mejor castillo del mundo repetía en su pequeña cabecita y sonreía asintiendo con la cabeza. Como era una niña muy inteligente, decidió reforzar las murallas del castillo, al darse cuenta que la marea subía más y más. Estaba juntando con sus pequeñas manitos porciones de arena con una concentración digna de admiración, cuando de pronto,  llegó corriendo Danilo, un niño  que había esperado el descuido propicio y mientras gritaba a todo pulmón: "terremotooooo" saltó y derrumbó todo a su paso. Saltó y saltó sobre el castillo, hasta que no quedó más que una montaña de arena, deforme y llena de pequeños símbolos de Nike. La niña lloró desconsolada, sin poder pronunciar palabra y de forma casi instintiva, fue corriendo en busca de su mamá, que se encontraba recostada a unos metros de distancia. Con las mejillas empapadas en llanto y la voz entrecortada  le contó  lo sucedido. Luego de oir la historia y mientras le secaba las lágrimas frotando con delicadeza los dedos pulgares contra sus mejillas, la mamá de  la pequeña Isabelita la intenta tranquilizar diciéndole: "Escucha bien princesa, ese chico hizo eso porque tú le gustas y es la única forma que se le ocurrió para llamar tu atención. Así son los niños, son unos bobos, ya no le hagas caso." La niña por más que trató, no logró entender aquella explicación, pero se quedó el resto del día intentando asimilarla. Si se lo decía su mamá, debía ser cierto. 

Ayer, coincidí con mi amiga Isabel en el facebook chat. Han pasado ya 20 años desde aquel desagradable incidente en la playa, y sus conflictos con el sexo opuesto siguen atormentándola. La pobre se ha topado con tantos Danilos en su vida, que está considerando firmemente la idea de volverse lesbiana. No se cansa de repetirme que los hombres somos muy extraños. En un nuevo intento por tratar de comprendernos,  lleva varios días leyendo un libro (se lo prestó su mejor amiga, dice.) : "He`s not that into you" ( "A él no le gustas tanto") Este libro menciona las"reglas" que te ayudan a saber si le gustas en verdad a un chico. Les menciono algunas de ellas:


A él no le gustas tanto:
  1. Si él no hace el primer movimiento.
  2. Si no te pide una cita llamándote o por mensaje de texto o por e-mail.
  3. Si no te invita a salir un miércoles o sábado por la noche.
  4. Si te pide compartir la cuenta en partes iguales.



Yo no se por qué, pero llega un momento en la vida de una mujer,  en que sin importar si es arquitecta, abogada, economista, contadora o diseñadora de modas, sea cual sea su profesión, llega un día el momento en que todas se vuelven psicólogas y empiezan a recitar leyes que consideran irrefutables: "Si le quitas la etiqueta a la botella de cerveza, no estas satisfecho sexualmente", "Si te olvidas lo que ibas a decir, seguro que es una mentira", "Si cuando te pregunta qué piensas, le respondes que nada, de seguro estás ocultando algo" y finalmente, "Si al ir por la calle te retrasas y caminas detrás de ella, estás inseguro respecto a la relación". Todas esas explicaciones tienen la misma validéz que la que expuso la mamá de Isabelita 20 años atrás, y ese tipo de explicaciones se trasmiten de generación en generación y se esparcen como un virus cerebral, muy difícil de eliminar.

Personalmente no estoy muy de acuerdo con esas leyes irrefutables. En mi caso por ejemplo la última vez que le he quitado la etiqueta a una botella de cerveza fue por que estaba borracho y se me ocurrió hacer pelotitas de papel y jugar básquetball intentando encestar en el escote de una amiga. Cuando me he olvidado lo que iba a decir, era por que probablemente iba a decir una idiotez de las mías.  Cuando digo que pienso en nada, es porque pienso en nada. Pensar en nada es posible, los hombres somos expertos en eso y aunque las mujeres no logran entenderlo, es cierto. Cuando camino con alguien en la calle y me retraso un poco, es  seguramente porque quiero soltar un pedo que lo vengo aguantando varias cuadras, que ya no puedo retener y me está haciendo sudar frío. Finalmente, Danilo destruyó el castillo, porque era un niño hijo de puta, terrible y malcriado, que le gustaba hacer eso y otras cosas, como quitarle las patitas a las hormigas, escupirle a su vecina, tirar las almohadas de su sala desde el quinto piso de su departamento a la calle, etc.

Mujeres del mundo, dejen ya de creer en todo lo que leen. Dejen ya de de buscar los consejos de como entender a un hombre en artículos de revistas o libros, escritos por mujeres.Hoy día les voy a dar un consejo que estoy seguro me van a agradecer. ¿Cómo saber si le gustas a un chico? Pregúntenle. Estamos ya en los primeros años del siglo XXI y hemos evolucionado en muchas cosas, ¿Por qué no intentamos evolucionar en las reglas de juego de las relaciones? ¿Qué tiene de malo en que las mujeres puedan tomar de vez en cuando la iniciativa?